Las esperas

Estoy hasta las mismísimas narices de esperar y de que no ocurra nada. Esta misma mañana he acompañado a mi padre al médico por un problema menor. La cita estaba prevista a las 9:45 y, como las entradas de Madrid son caóticas a esas horas, nos hemos ido con la fresca y hemos llegado con cuarto de hora de margen, es decir, a las 9:30. Por su puesto, he tenido que acoquinar 1.80 euros por aparcar una hora en zona verde. A las 10:25 he tenido que reaqcoquinar la misma cantidad sin que nos hubieran atendido y, como Murphy es así de mamón, según he cogido el ticket del parquímetro, llamada de mi padre: 'no vengas que ya estoy fuera'. Por su puesto, me he cagado en todo lo cagable.


A lo que iba. Si llegamos a ser nosotros los que llegan 45 minutos tarde a la consulta le hubiera dado exactamente lo mismo al médico las razones del retraso. Hubiera corrido turno y aquí paz y después gloria. Y me parecería normal y lógico. Pero también me parece normal que si el retraso se produce por la otra parte haya una compensación razonable. Como diría mi abuela: LOS COJONES 33¡¡¡


Lo mismo ocurre con los líneas aéreas, con las cuales tienes que estar con N horas de antelación y si llegas tarde pierdes el asiento, el billete, la cartera y la mitad de los puntos del carnet de conducir, pero sus vuelos se pueden retrasar horas, por no decir días, sin que nada ocurra.


Y todo esto sin hablar de Administraciones de Hacienda, Registro Civil, Seguridad Social, Oficinas del INEM, Tráfico, Ayuntamientos varios, etc. etc. etc. donde no sólo hay colas infumables, sino que además aquello de todos somos inocentes mientras no se demuestre lo contrario se lo pasan por el forro.



Por tanto y dicho todo esto, me declaro HASTA LAS PELOTAS y pido una limipia selectiva por parte de EJECUTOR que acelere todos estos temas.


Salud¡